...
Dado
que aun es temprano, y siguiendo ordenes, me dispongo a ponerme mi uniforme de
asistenta. He de colocarme una cofia blanca en el pelo, una blusa y una
minifalda negras, y un pequeño delantal blanco. Después prosigo con la medias
negras y unos zapatos negros con algo de tacón.
Nada
mas vestirme la Señora me hace llamar. Acudo a su habitación donde se encuentra
descansando y me dice que me dedique a vaciar sus maletas y colocar todas las
cosas en los armarios. ¡¡Madre mía que cantidad de ropa y de zapatos!! Por
supuesto que cualquier prenda que tenga la más mínima arruga ha de ser de nuevo
planchada.
Me
pongo manos a la obra. Voy vaciando cuidadosamente las maletas y colocando uno
a uno los preciosos vestidos de mi Ama... voy cogiendo los zapatos con
delicadeza para llevarlos a su sitio. Una vez terminada la tarea, Ama Sira me
enseña sus pies cansados. No hacen falta palabras. Termino de cerrar el
armario, me arrodillo al borde de la cama, cojo suavemente con mis manos uno de
sus delicados pies y comienzo a masajearlo. Pongo en ello todo mi cariño.
Masajeo con apretando con los pulgares para estimular la circulación en la
planta de esos pies tan especiales y tan agotados. Acaricio el talón. Masajeo
los dedos. Repito la operación con su otro pie.
Cuando
compruebo que mi masaje empieza a hacer efecto y mi Ama se empieza a relajar,
decido acercar mis labios y besar uno de sus dedos. Paso la lengua muy despacio
por el y poco a poco lo introduzco en mi boca, mmmmmm.... que placer! Paso al
siguiente dedo, sin dejarme un solo milímetro por saborear, exprimiendo todo el
encanto. Me encuentro tan excitada!!! Creo que la Domina lo ha notado y no le
ha gustado, porque oigo un susurro que dice: "Retírate"
Agacho
la cabeza avergonzada, me pongo en pie e intentado no hacer mucho ruido con los
tacones al andar, salgo de allí, cerrando la puerta tras de mi.
Paola
me comenta que tengo la tarde libre, así que la puedo dedicar a lo que quiera.
Decido que lo mejor que puedo hacer es ponerme uno de esos biquinis que venían
en mi maleta y tomar un poco el sol en la piscina. No me vendría nada mal coger
algo de color. Así que después de comer, me pongo un biquini negro y me marcho
a la piscina con mis enormes gafas de sol... que felicidad!!!
Paso
la tarde escuchando música y tostándome al sol (haciendo top-less para evitar
las marcas). Echo de menos a Ama Sira, pero por suerte hay aparece y parece que
viene dispuesta a tomar el sol a mi lado! Que bien!! Así que se tumba en una
tumbona junto a la mía a la vez que me hace un gesto para que no me levante.
Nos pasamos la tarde charlando.
En medio
de la conversación me indica que esa misma noche tiene preparada una pequeña
fiesta a la que va a asistir entre otros, una persona muy especial para ella,
un gran amigo. La idea es que estemos todos juntos, nosotras tres y los tres
invitados. Habrá un servicio de catering que se encargará de todo, con lo que
yo seré una mas en la fiesta. Eso si, Ama Sira me deja muy claro que los
invitados tienen rango de Amos para mí, así que cualquier cosa que me ordenen
yo la deberé acatar.
CONTINUARA...
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